¿Es preferible una correa clásica o un arnés?

En los últimos años es muy habitual ver que cada vez más personas pasean a sus perros con un arnés. Este tipo de sujeción permite que el perro pueda dar todo tipo de tirones sin lastimarse y facilita al propietario el control sobre un perro complicado. Además impide que por accidente el animal pueda soltarse y escapar.

Sin embargo no todos los profesionales están de acuerdo con que el arnés sea lo más adecuado para perros jóvenes en proceso de aprendizaje y aunque no hay una postura única muchos creen que el collar tradicional es preferible para educar a un can.

perro

Escoge el tamaño y el material adecuado

El problema con los collares vienen dado en muchas ocasiones por no escoger uno correcto. Hay que elegir un material suave para que no lastime al perro en caso de dar un tirón. El nylon es muy adecuado ya que no hace heridas pero a la vez es resistente, siendo mucho más barato y generalmente más bonito que los de cuero. Además podemos mojarlo, por lo que podemos utilizarlo sin problemas mientras bañamos a nuestro perro.

También debe de ser de la talla adecuada ya que uno demasiado ceñido puede asfixiar al animal mientras que si es muy flojo este podría escurrirse y huir con el riesgo de perderse, ser atropellado por un coche o lastimar a otras personas o mascotas.

Jamás se deben de utilizar collares de adiestramiento, como los de púas o ahorcamiento. Los primeros ya ni siquiera son utilizados por los profesionales, que los descartan por crueles y poco eficaces. Los segundos, en manos de una persona inexperta, pueden ser muy peligrosos.

En el coche, el arnés es la única opción posible

Cuándo llevamos al perro en el coche y lo sujetamos al cinturón o a una sujeción especial, debemos de hacerlo obligatoriamente con un arnés, ya que de hacerlo con un collar nuestra mascota podría ahorcarse en caso de un frenazo fuerte o un accidente.

El arnés también es la mejor opción para llevar a nuestra mascota al veterinario porque nos permite levantarlo y moverlo más cómodamente, así como inmovilizarlo si fuera preciso.

En definitiva no hay una solución que sea a gusto de todo el mundo. Todo dependerá en última instancia del animal y de su forma de pasear y de moverse. Muchos propietarios de perros tienen ambos sistemas y los combinan según lo que quieran hacer con su mascota.