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Cajas de arena para gatos

 

 

Los gatos son unas mascotas amorosas, independientes, graciosas y sobre todo muy limpios. Desde que están muy pequeños aprenden a hacer sus necesidades fisiológicas en su caja de arena, casi sin ningún entrenamiento. De hecho, he adoptado temporalmente gatitos pequeños que han usado inmediatamente su caja de arena. Es por estas características que los felinos son excelentes para apartamentos.

Sin embargo, para que un gato sienta el impulso de utilizar su caja de arena, ésta debe cumplir con ciertas condiciones. En primer lugar, la caja debe estar ubicada en un área tranquila, despejada y de ser posible, ventilada. Esto es porque a pesar de que la mayoría de las arenas para gatos disponibles en el mercado son bastante efectivas y no permiten que se escapen olores, es posible que la fuerte orina o heces de tus mascotas huela en algún momento, sobre todo cuando están cubriéndola. La caja de arena suelen ser de plástico, pues es un material fácil de limpiar, liviano y práctico. Su tamaño dependerá de la cantidad de gatos que tengas y sus dimensiones. El gato debe caber perfectamente dentro de la caja, girar sin quedar apretado, y debe tener espacio suficiente para mover la arena con sus patitas y tapar sus heces. Si tienes más de un gato, la caja debe ser proporcional. Si bien es cierto que no la usarán al mismo tiempo, esto reducirá la frecuencia de limpieza y cambio de arena y evitarás problemas de territorio.

La altura de la caja debe ser adecuada al tamaño de tu gato. Si es muy pequeño, una caja muy alta puede ser difícil de alcanzar y terminarán ensuciando junto a ella, pero tampoco puede ser demasiado baja, pues cuando traten de cubrir sus heces, la arena terminará volando por doquier.  Del mismo modo, es importante que uses una arena especial para gatos. Las consigues de muchas marcas, materiales y precios en las tiendas de mascotas,  pero lo imprescindible es que tengan la propiedad de aglomerarse al contacto con la orina, pues esto facilitará la tarea de limpieza diaria. En casa compramos una que tiene perfume, pues vivimos en un apartamento pequeño y eso evita que algún olor se escape. En casos de emergencia, puedes utilizar virutas o aserrín de madera en vez de arena. Sin embargo, esto no es igual de higiénico que la arena, pero puede sacarnos de un apuro.

De la higiene diaria de la caja de arena dependerá el aseo de la habitación y el bienestar de tu gato. Para ello utiliza unas palas especiales que suelen venderse con la caja de arena, que permiten recoger los desechos sólidos y la arena aglomerada sin necesidad de cambiar toda la arena. Mantener la caja de arena de tus gatos lo más impecable posible no sólo evitará que tu casa apeste, sino que estimulará a tu gato a utilizarla. De hecho, si algún día vez que tu gato rasca el suelo cerca de la caja con sus patas para cubrir sus heces, en vez de hacerlo en la arena, es porque la arena está sucia y es desagradable para tu mascota. Los felinos son animales muy limpios y escrupulosos, y si la arena está muy sucia, preferirá usar otra área para hacer sus necesidades. Por esta razón, es importante que vigiles estos detalles. Un gato sano es un gato feliz!

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Como hacer que un gato adulto acepte a un gato bebé

 

 

 

 

Una de mis mejores amigas es otra amante de gatos. En este momento es la humana de un hermoso gato mestizo negro azabache que ya tiene unos diez años. Como se mudó a un espacio más grande y sabe que un gato no es suficiente, quiere adoptar un nuevo gatito blanco. Sin embargo, tiene el temor que su gato consentido, dueño y señor del territorio no se sienta tan complacido con la idea y rechace o maltrate al nuevo integrante de la familia. Es por ello que hoy les traigo varios consejos para lograr que se adapten.

Aunque parezca una tarea difícil, teniendo en cuenta el nivel de territorialidad de los gatos, es posible que un gato adulto acepte completamente a un nuevo gato bebé, pero para ello debemos tener paciencia, pues será un proceso gradual. No hay una receta mágica para lograrlo. En primer lugar debes mantener a los gatos en habitaciones separadas un par de días, mientras el gatito nuevo pierde el olor de la calle y absorbe el de su nuevo hogar. Después de esto, toma un paño y frota con él las mejillas del gato antiguo, justo donde tienen las glándulas que emiten las «feromonas de la felicidad», esto es a los lados de la boca, un poco detrás de los bigotes. No te preocupes, se dejará frotar tranquilamente, pues sentirá que lo acaricias. Acto seguido, frota completamente al nuevo gatito con esa misma toalla, para que poco a poco se impregne del olor del otro gato. Sigue este proceso durante al menos tres o cuatro días. Luego de esto, frota nuevamente al gato antiguo con la toalla después de frotar al gatito nuevo, mezclando sus esencias.

Luego, cambia de lugares a los gatos. Si tienes al pequeño en una habitación, deja al gato adulto entrar allí, enciérralo un rato, para que se familiarice con el olor del otro. Deja en libertad al gatito pequeño, para que el resto de la casa se impregne con su olor. Repite este proceso durante dos días, luego de esto estarán listos para el contacto visual.

Pon a ambos gatos cerca, pero separados por algún cristal o rejilla. Puedes poner a los pequeños en un kennel y dejar al adulto suelto. De este modo comenzarán a familiarizarse con la visión del otro. Hazlo durante cortos periodos de tiempo, intercambiando sus lugares. Puedes comenzar a establecer asociaciones positivas, es decir, puedes alimentarlos al mismo tiempo, mientras están separados por la barrera. Luego de un par de días haciendo esto, puedes comenzar con visitas supervisadas.

Deja que ambos gatos interactúen, por periodos cortos y sin quitarles la vista de encima. Puedes darles premios deliciosos a ambos, para seguir formando las asociaciones positivas. Si hay algún signo de hostilidad, sepáralos delicadamente, haciendo un ruido fuerte con las manos. No grites ni regañes al gato residente. Trata de mantener las uñas de ambos gatos cortas, para que no se hagan daño en caso de alguna pelea.

Poco a poco, ve aumentando el número de horas de visita supervisada hasta que se adapten. No deberías tener mayor problema si sigues al pie de la letra estas indicaciones, sobre todo la que concierne a la mezcla de olores. Es importante que NO ignores a ninguno de los gatos. Si ignoras al bebé, el gato antiguo puede creer que ni tú mismo quieres al gatito nuevo; y si ignoras al adulto, puede sentirse desplazado. Trátalos por igual, verás como se convierten en buenos amigos!

 

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Cuidado de Gatos Albinos

Gato Albino

La primera vez que llevamos a uno de mis gatos al veterinario este nos informó que no era sólo un gato blanco, sino que era un gato albino. Esto es que tiene un defecto genético que afecta la producción de melanina, causando la carencia total de pigmentación en la piel, ojos y cabellos. Esta condición afecta por igual a humanos y muchísimos miembros del reino animal, incluyendo a los gatos. Si tienes un gato blanco, probablemente tengas un gato albino.

Es importante reconocer las señales que pueden indicarnos si nuestro mejor amigo tiene esta condición genética especial. Lo primero que debemos observar es el pelaje, que ha de ser de un blanco puro sin una sola mancha de otro color. La piel debe ser rosada y sin ninguna mancha o lunar. Los ojos pueden ser azules (claros u obscuros) o bien de dos colores. No menos frecuentes son los albinos más extremos, que tienen ojos más bien rojos.

Si tu gato es albino precisa de algunos cuidados especiales. En cuanto a la alimentación, juego y cuidados generales son como cualquier otro gatito. Sin embargo es importantísimo mantenerlos alejados de los rayos solares, pues por su condición son proclives a desarrollar cáncer de piel. Es por ello que puedes consultar a tu veterinario para que te recomiende algún bloqueador solar que no sea tóxico y que debes colocar en la nariz y orejas del gato, sobre todo si éste se expone largas horas al sol. Trata de que no salga a recibir los rayos solares directos entre las 12PM y 5 PM, pues son las horas en que son mś intensos.

El color blanco suele estar asociado a la sordera, sin embargo esto no es algo generalizado. Hay quienes afirman que todos los gatos azules son completamente sordos, o que los de ojos bicolores son sordos de un solo oido, pero esto no es rigurosamente cierto. De hecho, mi gato es de ojos azules y no tiene nigún tipo de discapacidad auditiva. Esta creencia viene del hecho de que los gatos de ojos azules sordos tenía mayor incidencia gracias al cruce indiscriminado de ejemplares, sin tomar en cuenta la transmisión este problema; que se fijó en el características como el color azul. En estos momentos no suele ser frecuente este problema, al menos no con relación al color de ojos.

La sordera se manifiesta en los primeros meses de vida, el gatito no hace caso a su nombre ni a ningún ruido, por lo que es sencilla de diagnosticar. Si bien es cierto que este defecto es irreversible, no representa mayor problema para un gato que viva en el interior de una casa, donde todas sus necesidades están cubiertas por su humano. Si el gato llevara una vida más bien silvestre, si sería una discapacidad insuperable que causaría el rechazo de sus congéneres, dada la dificultad que tendría el gato para adaptarse al este estilo de vida en el que dependen por completo de su agilidad y astucia conjugada con sus sentidos.

Tu gato albino sólo precisa  cuidados normales, aunados con un poco de protector solar y muchísima comprensión en caso de presentar alguna discapacidad auditiva.

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