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Características de las tortugas

tortuga

Las tortugas son mascotas desde casi los albores de la humanidad, por su carácter tranquilo y por el poco cuidado que requiere, porque hay que decirlo su atractivo está lejos de motivar a nadie a llevarla a casa, son de aspecto primitivo y demasiado pasivo.  Hay que conocer las tortugas como a todo animal que disponemos convertir en nuestra mascota, de esta manera podemos lograr que se adapte y que sobreviva ante los problemas que afrontan todas las mascotas.

Lo más distintivo en las tortugas suele ser la caparazón que algunos denominan carapacho, funciona como un «vestido» con cavidad donde suele esconder cabeza y extremidades. Una rareza de la naturaleza que ha permitido que sobrevivieran en un medio que podría ser muy hostil, frente a su pasividad y lentitud. Pero la supervivencia de las tortugas se remonta a miles de años, porque desde la prehistoria se tiene indicios que aparecieron las primeras tortugas, y fueron mascotas del hombre desde entonces, por lo que se cree nada menos que una existencia de 2,000 años.

Su carácter tranquilo es lo que las hace unas buenas mascotas, el carácter deriva de la timidez y esa misma timidez las hace volcarse a la caparazón durante todo el tiempo que sea posible, lejanas y silenciosas, cuando quieren estar en su caparazón no conviene molestarlas porque también pueden tener como cualquier animal un acceso de cólera y atacar con mordida de unos dientes que son afilados y pueden hacer daño. Además de evitarlas cuando quieren estar en su mundo, hay que evitar agarrarlas en cualquier momento porque muerden las manos y atacan.  Las tortugas se clasifican  según la forma en que se protegen guardando la cabeza en la caparazón, ya que algunas doblan el cuello lateralmente y otras  se defienden escondiendo el cuello hasta medio de la caparazón.

Esa misma clasificación resalta a las tortugas de cuello de serpiente con membrana interdigital, viven en el mundo acuático, y en los mares más distantes del mundo como América del Sur y Australia aunque también e menor cantidad en Africa. Las tortugas conocidas como Pleurodiras se clasifican en   Africanas, Afro-Americanas y Austro-Americanas. Las tortugas que más existen en el mundo son las Criptodiras con 200 diferentes especies que se comportan diferente y en ello estriba su diferenciación, habitan en tierra y océanos, conocidas como tortugas marinas de carapacho liso, tortuga fluvial centroamericana, tortugas terrestres, tortugas semi-acuáticas, tortugas de ciénaga y tortugas Marinas de Laúd.

Su constitución o el entorno las hacen susceptibles a enfermedades respiratorias, los resfriados que son comúnes en ellas, sin ser detectados y atendidos acaban fácilmente con la tortuga a través de una neumonía,  Aunque pensarían que estas enfermedades se originan por el contacto con el mar, lagos y demás agua, realmente devienen del contacto en un entorno polvoriento, sin luz solar, sin buena alimentación, temperatura inadecuada y estrés. ¿Cómo se estresan las tortugas? sencillamente cuando como cualquiera se siente alterada por un entorno que es peligroso o así lo percibe, esto sería niños que la mantienen en sozobra, gatos y perros.

Para prevenir que la tortuga se enferme o se vuelva irascible hay que tomar en cuenta que debe alimentarse adecuadamente, nada de desechos y alimentos indicados por un veterinario que es quien puede recomendar mejor lo que requiere por sus necesidades. Cuando se sospecha de un resfriado en la tortuga hay que desinfectar y revisar minuciosamente, en las fosas nasales, tanto mejor si se lleva a una consulta veterinaria que descarte o confirme el diagnóstico.

Hay que proveer a las mascotas tortugas las condiciones adecuadas para vivir, espacio especialmente destinado a su hogar, o sea habilitar un terrario que recree sus condiciones naturales, éste suele ser fácil de armar, hay que cuidar que la tierra que se destine a su espacio no se exceda porque el polvo de la tierra seca, y en el hogar el polvo del entorno en exceso, la resfría y la pone en peligro. Por demás necesita su alimentación y agua, un pequeño estanque donde jugar si es de las que suelen encontrar agradable dar un chapuzón.

Aunque como hemos mencionado algunas podrían vivir en un entorno compartido de tierra y agua, lo ideal es un acuario que funcione para su tamaño y que le de espacio para moverse. Hay que disponer de tierra y también de un refugio donde las tortugas podrán hibernar o relajarse cuando la temperatura sube o baja, porque cualquier cambio de temperatura tiene un efecto sobre su tranquilidad.  Hay que proveer a su recinto de fuentes de calor para que se mantenga la temperatura estable, si tenemos posibilidades de darle a nuestra tortuga condiciones óptimas de vivienda.

Las tortugas se reproducen en la primavera por lo que por esa época habrá de pensar en el asunto si se quiere tener más tortugas. Cuando la tortuga ha sido fecundada pone huevos, 8 a 10, que resguarda en la tierra y que al cabo de dos meses se romperán y darán nuevos habitantes del terrario.

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Tortugas como mascotas

La tortuga es una mascota muy apreciada, sobretodo por los más chicos de la casa, ya que generalmente tienen un tamaño que les permite “sentir que están a su medida” y las pueden cuidar y manipular ellos, si son cuidadosos y se les enseña a hacerlo.

Conviene saber que las tortugas son reptiles, así como también lo son los lagartos, las serpientes y otros animales que se arrastran. Tienen como característica que las diferencia del resto de los animales que poseen un caparazón, que las cubre en un porcentaje muy grande de su cuerpo y que las protege del mundo exterior, ya que su defensa frente a cualquier agresión consiste en esconderse completamente dentro de él. Su piel está compuesta por placas escamosas, que también contribuyen a su protección. Como son animales de sangre fría, durante el invierno o en ocasión de bajas temperaturas, la tortuga hiberna y durante ese período no se alimenta, pero tampoco tiene actividad de ningún tipo. Las tortugas que se acostumbran a la vida doméstica, como mascotas, a veces van reduciendo ese período de hibernación y algunas llegan a eliminarlo.

Los cuidados que hay que tener para estos animales, dependen del tipo de tortuga de que se trate, ya que existe una enorme variedad de especies. En general se dividen de acuerdo al hábitat en que se desarrollan, por lo tanto hay tortugas marinas; es difícil que estas tortugas sean tomadas como mascotas, ya que son las especies más raras, algunas pueden ser de gran tamaño y además requieren un ambiente oceánico para poder sobrevivir. Hay tortugas terrestres, que sí suelen ser tomadas como mascotas, pero presentan una enorme variedad de subespecies. En general se alimentan de vegetales. También existen tortugas acuáticas y subacuáticas, cuyo hábitat son los ríos, lagos o pantanos; pueden ser tomadas como mascotas, pero será importante saber que se les debe proporcionar un ambiente para vivir que sea húmedo.

En conclusión, en el momento de adquirir una tortuga como mascota habrá que informarse de qué tipo es la tortuga para brindarle los cuidados necesarios para que se mantenga saludable.

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La alimentación de las tortugas

Las tortugas terrestres son las más frecuentes en los hogares y las más queridas como mascotas. Aunque algunas están en peligro de extinción y no pueden adquirirse, si acudes a una tienda autorizada sólo te venderán tortugas aptas para ambientes domésticos. Las tortugas “de caja” son las más habituales en domicilios, por lo que en este artículo se centrará en ellas. El tema que vamos a tratar es el de su alimentación.

Para que las tortugas de tierra crezcan sanas y fuertes es necesario aportarles una alimentación sana y equilibrada. Esta idea incluye la variedad en su dieta como elemento imprescindible. La base de su alimentación se compone de frutas, verduras y hortalizas, siendo éstos los elementos que nunca podrán faltarle.

En este grupo alimenticio destacan como especialmente óptimos el tomate, la parte blanca del apio, calabacín, hinojo, piña, maíz, sandía, melocotón y setas, por ejemplo.

Por otro lado, nuestra tortuga necesitará una base de proteínas. Lo más frecuente es recurrir para esto a los brotes de soja, aunque algunas especies comen también insectos y gusanos ocasionalmente.

En lo que respecta a las tortugas que están creciendo, o para las hembras que están fecundando huevos, es necesario incorporar algunos elementos de calcio. Basta con espolvorear el calcio sobre la comida. No obstante, esta idea habrá de ser consultada con el veterinario: él nos recomendará la marca más apropiada para nuestra mascota.

Por otro lado, todas las tortugas necesitan tener un gran recipiente de agua. De él no sólo beberán el agua que necesiten, sino que también se bañarán y refrescarán con ella.

Al margen de los alimentos que les damos, hemos de controlar las cantidades. Muchos dueños sobrealimentan a sus tortugas, pudiendo generarles graves problemas de salud. Esto puede generar que estén inactivas. Si nuestra tortuga ha enfermado, es muy posible que una alimentación errada esté en la base del problema de salud desarrollado.

Por otro lado, y aunque en este artículo no podemos explicar con detalles qué debe comer cada tortuga, ya que hay muchos factores implicados, estamos intentando dar una visión de las cuestiones más importantes. Para los detalles es mejor acudir al veterinario. No obstante, es importante reseñar aquellos alimentos prohibidos que nunca deberán ingerir. Algunos de éstos son: habas, judías, guisantes, plátano, queso y carne. Las tortugas tropicales sí podrán comer carne, sobre todo caracoles y lombrices, pero recordamos que estamos hablando de las tortugas “de caja”.

Otro grave error, en contra de la creencia popular, consiste en darles pienso de perro. En absoluto es bueno para su salud, ya que incorporan suplementos alimenticios que cubren unas necesidades muy superiores a las que las tortugas tienen. No obstante, el alimento seco de los gatos sí puede ser bueno para las tortugas de patas rojas, pero debe ser administrado sólo de forma ocasional.

La tortuga de tierra, mascota ideal

Las tortugas pertenecen a la familia de reptiles sauropsida. Habitan en la Tierra desde hace más de 260 millones de año, por lo que su aparición data del periodo Triásico. Originalmente las tortugas eran terrestres, aunque posteriormente algunas evolucionaron para ser acuáticas.

Las características constitutivas de la especie se basan en que poseen un tronco ancho y corto cubierto por un caparazón que lo protege. En la parte delantera, sobresalen dos patas y la cabeza; en la posterior, la cola y un segundo par de patas. Una gran parte de su columna vertebral está adosada a su caparazón: por lo tanto, la respiración se produce por movimientos abdominales y no de la caja torácica, que sustituyen al diafragma mamífero y movimientos de la faringe. Aunque carecen de dientes, tienen un pico que recorre su mandíbula. Por otro lado, son ectotérmicas, lo cual significa que su metabolismo está asociado a la temperatura ambiental (de ahí que hibernen).

Como otros reptiles, mudan la piel, pero en su caso, se trata de un proceso progresivo. Igualmente, mudan los escudos del caparazón.

Por otro lado, son animales muy longevos, en todas sus especies. En términos generales, hemos de saber que las tortugas de hábitat terrestre, marino y de agua dulce. Hoy hablaremos de las primeras.

Existen diferentes especies de tortugas de tierra protegidas por la ley, como la tortuga mora y la tortuga mediterránea. Esto significa que está prohibida tanto su captura como su vida en cautividad. Sin embargo, existen otras especies que pueden adquirirse en tiendas especializadas, como la tortuga de patas rojas (que es la más común entre los principiantes), la de patas amarillas, y la tortuga de caja.

El cuidado de este animal en el hogar no es demasiado costoso. Esta es una de las principales razones por las que se considera una de las mascotas más recomendables para los niños.

Las principales cuestiones que habremos de cuidar si tenemos una tortuga de tierra en casa serán su alimentación, el alojamiento y las posibilidades de reproducción.

En lo que respecta a alimentación, pueden comer muchos tipos de frutas y verduras. Para completar la dieta, se puede añadir algo de carne; por otro lado, es bueno que ingieran algo de calcio, para lo que se les proporcionan preparados específicos.

En cuanto a su alojamiento, habremos de preparar un terrario, cuyo tamaño variará en relación a nuestra tortuga; estos suelen complementarse con fuentes externas de calor. Por otro lado, el terrario habrá de tener algún refugio y algún recipiente.

La reproducción de las tortugas se produce durante la primavera, así que será en este momento cuando habremos de tener en cuenta los cuidados reproductivos. Los machos se pelean por las hembras y cuando las fecundan entierran los huevos en la arena, donde permanecerán hasta su eclosión.

Tortugas curiosas

Tortuga Laúd

Para todos los amantes de las tortugas, hemos confeccionado un recopilatorio de curiosidades que hemos ido descubriendo.

  • La tortuga más grande que se ha encontrado pesaba 916 kilos. Sucedió en Gales en 1988. Se trataba de un ejemplar de tortuga laúd. Esta especie de tortuga puede llegar a medir 1,80 metros.
  • Las tortugas más pequeñas son las tortugas manchadas, cuyo tamaño máximo de caparazón oscila entre los 6 y 8 cm. ¿No sorprende que seres de unas dimensiones tan diferentes puedan pertenecer a la misma especie?
  • Los científicos calculan que por el momento sólo se han catalogado 1 de cada 3 especies de tortugas existentes.
  • Los fósiles de tortuga más antiguos datan de hace 100 millones de años.
  • Las tortugas tienen la vista, el olfato y el tacto muy desarrollados. Sin embargo, su oído está muy poco desarrollado.
  • Existe un tipo de tortuga que sacude a sus presas en el fondo del mar. De este modo, quedan aturdidas para que ella se las pueda comer. ¿Cómo se llama? Tortuga mata-mata.
  • En el apareamiento, los machos tratan a las hembras con mucha violencia: empujarlas y morderlas son actitudes que forman parte del cortejo.
  • Hace unos años se encontró en Cuba una tortuga con dos cabezas. Sucedió en Cabi Sijú en 2005.
  • Algunas tortugas terrestres, como las que viven en las Islas Galápagos, viven normalmente más de 100 años.
  • Se cree que la tortuga más vieja del Mundo podría tener en torno a 500 años. De hecho, sería el reptil más longevo. Vive en Hainan, al suroeste de China.
  • Las tortugas verdes no alcanzan la edad fértil hasta los 25 o 30 años, como mínimo. Algunas no son fértiles hasta los 40 años. Para poner los huevos, suelen regresar al sitio en el que nacieron y los depositan por la noche, para protegerse de los depredadores.
  • Las manouria emys construyen un nido elevado para hacer sus puestas. Para ello, despejan una superficie de 100 metros cuadrados, apartando hojas, ramas y demás, y crean un montículo de 1 metro de diámetro y 50 cm. de alto. Ponen grandes cantidades de huevos.
  • La tortuga más amenanzada es la tortuga de caparazón blando de Shangai: apenas quedan 4 en el mundo, una pareja vive en China y la otra en Vietnam. Se está intentando por todos los medios que procreen.
  • Richard Ougst es uno de los mayores coleccionistas privados de tortugas. En su casa de Tribeca (Nueva York) alberga en torno a 1000 tortugas. El Estado de Nueva York le ha dado una licencia para rehabilitar reptiles
  • La National Geographic Society utilizó dos ejemplares de Tortuga verde para probar la Krikercam (un sistema de exploración marina con camara de video e instrumentos científicos en un aparato de 400 g.). El aparato se instaló sobre su caparazón para conocer el mundo de las tortugas marinas así las profundidades marinas.

Tortuga gigante única en el mundo muere en Galápagos

Con el nombre de el «Solitario George«,se conoció a una enorme tortuga de la clase denominada Galápagos que desde 1971 habitaba en el Parque Nacional Galápagos, luego de que ese mismo año fuera descubierta por unos cuidadores de cabras en la Isla Pinta, también del Archipiélago de las Galápagos. Con ella se extingue una subespecie de tortugas que pese a los esfuerzos científicos no se logro evitar. Al parecer un paro cardíaco acabó con la tortuga.

La tortuga gigante como se le conocía, fue visitada durante mucho tiempo por turistas de todo el mundo, tenía un poco más de 100 años, pues se presume que la tortuga gigante de Galápagos, habría nacido en 1909.  Cuando se encontró a la tortuga en la década de los ’70 se buscó por toda la Isla Pinta, las tortugas hembras de su especie para promover que Solitario George tuviera descendencia y no se perdiera con él, la especie.

Sin embargo aunque se encontraron dos hembras, los huevos fueron infértiles y luego se trató de aparejar a Solitario George con tortugas de una especie similar que también resultaron esfuerzos infructuosos. No hubo pese al empeño puesto manera alguna de preservar la especie de tortuga gigante y ahora se ha extinguido. Se cree que estas tortugas vivían durante miles de años en Isla Pina en Galápagos pero que la modificación natural de su hábitat redujo su número, hasta que hoy están extinguidas con Solitario George.

La tortuga pesaba alrededor de 100 kgs, y era una de las muchas especies que encontró en su viaje por la región el naturalista Charles Dawin por aquella época, habían en Galápagos más de 20,000 tortugas de las más variadas especies, cierto es que el paisaje cambió para los años ’70 cuando encontraron a «Solitario George» de tal manera que ahora se ha extinguido. El por qué la tortuga acompañada por dos hembras de otra especie durante cerca de 20 años no se reprodujo o los huevos resultaron infértiles se debía a según los científicos «desórdenes hormonales» en la perspectiva popular, se decía que el réptil era homosexual.

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Tortuga Galápago de Florida I

tortuga japonesa

Para los que se apasionan de las tortugas como mascota, hoy les contamos sobre una de sus variedades que goza de la preferencia de muchos, la llamada   jicotea elegante, conocida también conocida como galápago de Florida o como la  tortuga de orejas rojas. Es originaria de las zonas costeras del sur de Estados Unidos y norte de México aunque hoy en día existe en todo el mundo en calidad de mascota.

La tortuga gálapago de Florida o jicotea elegante, es un ejemplar que se adapta fácilmente al entorno y por ello quizá es tan apreciada a la hora de tenerla como mascota, aunque no todo es bueno porque está citada por la Organización Internacional de la Naturaleza entre las 100 especies invasoras más dañinas del mundo. Es un atractivo ejemplar si te gustan las tortugas, la caparazón puede alcanzar hasta 30 cm de longitud, y en pocas ocasiones de  40 cm, aunque la mayoría de las que se tienen como mascotas suelen ser  de entre 12 a  12 a 20 cm.

Esta tortuga galápago de Florida tiene características de caparazón   superior, conocida como caparazón dorsal con un escudo vertebral que es la parte central del mismo, y la inferior,  La  caparazón suele ser según el ejemplar de diferentes colores, mientras que en las tortugas que acaban de nacer es color verde hoja, y conforme van creciendo se tornan verde muy oscuro, para en la madurez ser de  tono entre marrón y oliva. El plastrón siempre es de color amarillo claro, y el escudo está cubierto con rayas y manchas, ése es un regalo de la naturaleza para la tortuga que así se camufla de sus antagonistas.

Estas tortugas cuando son pequeñas son iguales y apenas pueden distinguirse las de uno y otro sexo, alcanzan su edad sexual entre 5 o 6 años, lo que cambia ligeramente cuando se crían como mascotas, porque no hibernan y comen bien lo que resulta en un crecimiento acelerado y aunque no inmediato si maduran sexualmente más rápido que lo harían en su entorno natural.

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Tortugas para mascotas en el hogar

tortuga

Hasta poco años atrás las tortugas solían ser las mascotas más apreciadas en el hogar, por su carácter tranquilo y por su fácil cuidado, pero pronto se fueron agregando a las mascotas para el hogar, las más variadas especies y la tortuga fue quedando relegada. Hoy se sitúa de nuevo entre las mascotas ideales para los pequeños de casa,  porque con un simple terrario o una pequeña pecera pueden vivir muy bien, según sea la variedad que sea. Pero aunque el carácter de las tortugas es tranquilo y son poco dadas a enfadarse con los humanos, hay que alertar a los niños, la edad ideal para enseñarles a tener una tortuga es a partir de los 6 años, a que como todo animal si se le molesta reacciona con enojo, algunas veces solo apartándose a su caparazón y otras mordiendo.

Para tener una tortuga como mascota habrá que decidirse sobre dos clases de tortugas domésticas, las acuáticas y las terrestres. En el caso de las acuáticas con una pecera de suficiente tamaño que acomode a las pequeñas tortugas será suficiente. Hay que añadir a la misma un purificante de agua que evite que la misma se contamine, también un poco de grava y un componente especialmente indicado para evitar que por la humedad la caparazón se dañe, y esto lo debes adquirir en una tienda especializada.  Mientras que para las terrestres un terrario de regular tamaño que contenga piedras lisas y una superficie totalmente seca.

La superficie del terrario debe contener recipientes para agua potable que la tortuga pueda consumir sin  exponerse a volcarlo o moverlo y con ello dañarse. Es importante si se piensa en tener tortugas mascotas por mucho tiempo que las mismas se adaptan mejor en una pecera que tenga espacio para superficie seca, por ello es importante comprar habitats en tiendas especializadas que lo mismo tienen un área como alberca y tierra o grava para que la tortuga pueda vivir en ambos ambientes, porque ninguna tortuga se adapta realmente a solo agua, o solo tierra. La alimentación es fácil y se adquiere en las tiendas que también comercializan las tortugas.

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Las Mascotas y su Evolución

Las Mascotas y su EvoluciónParece que están el hecho de tener distintas clases de mascotas ha evolucionado a través del tiempo. Hace unos años, lo común era considerar dentro de las posibilidades de conseguir una mascota, tener un perro, un gato, pececitos, tortugas, pájaros, loros y otros animales similares; sin considerar mascotas más grandes, para aquellos que tienen posibilidades de alojamiento de tamaño considerable, como pueden ser caballos o felinos de mayor tamaño.

Más adelante, comenzaron a ponerse de moda otra clase de mascotas, más exóticas y del gusto de unos pocos: las famosas iguanas, que inundaron el mercado, los lagartos, víboras, serpientes, arañas y hasta roedores como ratones y ratas.

No debemos olvidar que existió, también, la famosa “mascota virtual”, especie de aparatito, que venía con un pequeño programa, con una pantalla en la que se mostraba cuales eran las necesidades de la mascota en ese momento. Si tenía hambre había que alimentarla para que no se enfermara o muriera; si tenía sed había que brindarle agua; si estaba triste había que darle consuelo, si tenía frío, abrigarla, y así sucesivamente.

Este juego virtual, si bien no servía para aquellos que requieren de una mascota cariñosa, podía ser interesante para que los niños y adolescentes se dieran cuenta del trabajo y la responsabilidad que implica tener una; es decir que no se trata sólo de disfrutarla, sino también de cuidarla y mimarla para que esté saludable y se sienta bien.

En la actualidad, con el mundo globalizado, cada uno puede tener la mascota que quiere, de acuerdo a sus gustos y preferencias, ya que no es difícil acceder a animales que no eran tan fáciles de conseguir tiempo atrás. Pero las mascotas siguen cumpliendo el mismo papel importante que tuvieron siempre. Son objeto del cariño de muchos, ellas mismas nos brindan amor, y a veces nos entregan protección y compañía, de manera diferente, de acuerdo a cada una de sus características.